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martes, 10 de junio de 2008

USINA, Raúl González Tuñón


Cualquier tarde.
Yo anduve por sus muelles
Sombríos, largos de fluviales nombres
-Marne, Loire, Oise, Seine-.


Las aguas sucias de petróleo y aceite.


Hablo del riachuelo proletario, abandonado,
A los pies de París
Arrastrándose
Igual que esos pontones de maderas cansadas
Que cargan vino, cemento y cereales
Y por la noche cuidan los perros guardianes.


Esos perros lanudos, atorrantes, tan humanos,
De sordos ladridos y turbias miradas
Que a veces cuelgan en los viejos puentes
Una tristeza dolorosa y extraña.


Boliches para obreros y ladrones
Que al mediodía comen carne de buey y hablan
De cosas importantes.


Mostradores maduros de puñetazos y de canciones
Moscas aplastadas contra los vidrios por los mocosos sin calzones.


Es para esas usinas sordas de oxidados soles,
De gruesas lluvias
-que me ahoga este poema.


Raúl González Tuñón,
Argentina


lunes, 9 de junio de 2008

BREVE ANTOLOGÍA, Álvaro Yunque


FE


Sentado en el tranvía, pensativo,
Decíame: ¿Es que en vano corre el tiempo?,
¿Es que siempre ignorancias e injusticias
Flagelarán al infelice pueblo?,
¿Es que siempre habrá mansos que soporten
La servidumbre y siempre habrá soberbios?
¿Es que aun la electrofuerza no propulsa?
¡Sangre hecha luz!, ¿El carro del progreso?
¡Y qué honda tristeza me invadía
Paralizándome como un veneno!
Mas, sentado a mi diestra, con su traje
De labor sucio y roto, vi un obrero;
Y, ¡oh, júbilo!, ¡Aquel hombre miserando
Tenía un libro en sus callosos dedos!;
¡Y lo leía cavilosamente!
¡Qué proficua lección me dio ese obrero!
Entreví el ideal por los suburbios
Sembrando ideas, dando sentimientos;
¡Y en vez de mi dolor, sentí pujante,
Que una ola de fe me alzaba el pecho!


VERSOS AL CLARO DE LUNA


Claro de luna: espíritu del mármol,
¡Quién poseyera tu serenidad!
Mi carne de hombre en ti se hunde gozosa,
Como en un luminoso manantial;
Mi carne de hombre cuya voz es eco
De la quejumbre de la humanidad.


Vagando por las calles solitarias y mudas
Como venas exhaustas del tísico arrabal;
Pensando en la miseria y el dolor que esconden
Estas casuchas que me ven pasar;
Me dije: ¡Quién gozara, claro de luna olímpico,
De esa pentélica serenidad
De no sentirte en nada culpable de lo triste
Y de lo malo que en los hombres hay!


Pero él me dijo: "Sufres porque aun no amas a todos,
Porque aun tu amor sólo a los puros das;
Ya ves como me entrego sin inquirir razones,
Me entrego todo a toda la ciudad.
Sé que sólo hago bien y voy sereno
Porque conmigo mismo me hallo en paz".


Oh, el hermano de todos, feliz claro de luna;
¡Quién poseyera esa felicidad!




NIÑOS DEL ARRABAL


Allí donde la urbe no llega todavía
O donde dejó algunas casitas olvidadas:
Ranchos de paja y barro,
Casuchones de latas,
Que caminar parecen hacia ella,
Como para alcanzarla;
Juegan los niños sucios y descalzos
De mejillas carnosas y brillantes miradas.


¡Y son hermosos estos niños sucios
Bajo el redondo sol, junto a la inmensa pampa!


En tanto muge la ciudad oscura
Por la nasal sirena de sus fábricas.
Libres y hermosos corren y al sol juegan los niños;
Como frutas maduran estos frutos con alma.


Y frutas son, tan sólo hermosas frutas
Que en un festín de ricos han de ser devoradas:
Los niños en la fábrica almorzados,
Las niñas como postre y con champaña.


¡Pienso en esto y los puños
Se me hacen dos garras;
Pienso en esto y los gritos
Hierven en mi garganta!


Álvaro Yunque,

Argentina


domingo, 8 de junio de 2008

PALMAS Y GUITARRA, César Vallejo



Ahora, entre nosotros, aquí,
Ven conmigo, trae por la mano a tu cuerpo
Y cenemos juntos y pasemos un instante la vida
A dos vidas y dando una parte a nuestra muerte.
Ahora, ven contigo, hazme el favor
De quejarte en mi nombre y a la luz de la noche teneblosa
En que traes a tu alma de la mano
Y huimos en puntillas de nosotros.

Ven a mí, sí, y a ti, sí,
Con paso par, a vernos a los dos con paso impar,
Marcar el paso de la despedida.
¡Hasta cuando volvamos! ¡Hasta la vuelta!
¡Hasta cuando leamos, ignorantes!
¡Hasta cuando volvamos, despidámonos!

¿Qué me importan los fusiles?,
Escúchame;
Escúchame, ¿qué impórtanme,
Si la bala circula ya en el rango de mi firma?
¿Qué te importan a ti las balas,
Si el fusil está humeando ya en tu olor?
Hoy mismo pesaremos
En los brazos de un ciego nuestra estrella
Y, una vez que me cantes, lloraremos.
Hoy mismo, hermosa, con tu paso par
Y tu confianza a que llegó mi alarma,
Saldremos de nosotros, dos a dos.
¡Hasta cuando seamos ciegos!
¡Hasta
Que lloremos de tánto volver!

Ahora,
Entre nosotros, trae
Por la mano a tu dulce personaje
Y cenemos juntos y pasemos un instante la vida
A dos vidas y dando una parte a nuestra muerte.
Ahora, ven contigo, hazme el favor
De cantar algo
Y de tocar en tu alma, haciendo palmas.
¡Hasta cuando volvamos! ¡Hasta entonces!
¡Hasta cuando partamos, despidámonos!

César Vallejo,

Perú

sábado, 7 de junio de 2008

A LA PATRIA, Gabino Palomares


Voy a hablarte, querido compañero
,
De la patria que ha de forjarse abajo,
Con los que hacen andar las herramientas
Y no tienen más riqueza que sus manos.


No te puedo querer como te hicieron,
Quiero verte salir con tus conductas,
Las que nacen del alma de tu gente,
No con las que te dan a que consumas.


No te puedo mirar siempre engañado,
Eligiendo a los que impusieron ellos;
Mientras calman sus ansias de grandeza,
Tú te elijes los yugos a tu cuello.


No te puedo querer siempre callado,
Quiero oírte maldecir y blasfemando
Acabar con la paz que te inventaron
Para infundirte mil miedos a cambio.


Que la rabia se torne lucha, hermano,
Defendiendo lo que hicieron tus manos.
Nada valen los ricos sin tus horas
Que comparten los buitres del estado.


Responderemos ante la mentira
Y la rabia convertida en estrategia
Con dolor en maniobra organizada
Y esta lucha de abajo hecha conciencia.


Mienten cuando llaman "al trabajo
En armonía: los ricos y los pobres",
En mi casa hace falta el alimento
Y en la suya crecieron los millones.


Miente, señor, cuando dice conmovido
Que esta alianza ha de quitarme la pobreza:
Más baratas tal vez quiera mis manos
Para dar a unos cuantos la riqueza.


Usted dice patrias pobres contra ricas
Y en mi patria me siguen explotando,
¿Cuánto gana mi pueblo en su llamado?
¿Cuánto el rico va a estar aprovechando?


Mi enemigo me marca al enemigo
Y quiere que le ayude con el teatro:
El que a dos amos sirve, sirve a uno;
No me puede engañar, yo estoy abajo.


Sólo habré de llamarte Patria Mía,
Si tomamos las riendas y el camino;
Sólo habré de llamarte Patria Libre,
Si los ricos no marcan tu destino.


Gabino Palomares,

México


(Texto proporcionado por Gustavo Pérez Hinojosa).


viernes, 6 de junio de 2008

BREVE ANTOLOGÍA DE RAQUEL JODOROSWKY


HOMENAJE


(Y una semblanza de Katya Lapoint)


Declaración


Ya no me importa el escombro de la experiencia

Ese pasado con pies de plomo, no me sirve

Su arquitectura y engranaje roto

En el umbral de otros tiempos.

Hoy deseo la existencia sin nombre

El fuego del agua que corre

En la búsqueda del alma.

Quiero entrar en los juegos de otro sol

Olvidar los mínimos instrumentos del terror

La prolija piel que han marcado las torturas

No creo más en lo humano y sus enigmas

Ni el viento que hace muecas

Sobre un río de lenguas desatadas

No quiero abrir los cajones antiguos

Y que salte el espíritu de un ancestro

De barro y rostro desplumado. No quiero volver

A la casa desvastada llena de alas

De mariposas quebradas.

Nada de lo que tuve que aprender

Nada de pintar todo de rojo las catedrales del olvido

Sólo quiero vestirme de flor

De hoja que incendia

Y respirar como respira el mundo

En redondo, sin principio ni fin

Sola hacer frente a la soledad de mi destino

Y vivirlo más y mejor.



POEMAS


En el quinto día del quinto mes

Se inicia el bautismo del tigre.

Se le hace beber algunas gotas

De un líquido sagrado

Para que se convierta en mensajero

Del espíritu de la Montaña de Diamante.

Ahí se encuentran de manera visible

Rostros de sabios y nombres

Dados a cada piedra

Y donde quedó esculpido

El Modelo de la Creación.

Si alguien visita en persona

La Montaña de Diamante

Tragando carbones encendidos

Podrá vivir en más de una dimensión

Sin tener que abandonar la tierra.

Y si fija la mirada

En la región del misterio

Podrá contar cuántos Dioses

Desterrados danzan

En una sola lágrima del tigre.

En los mundos de arriba

Hay el camino de otras gentes

Un poblado de espíritus

De hombres y mujeres

Que desaparecen

Y vuelven a aparecer.

Salen de la piel

Hasta que la aurora

Encuentra al buscador.

En los rumbos de lo alto

Se reconocen los poetas

Que poseen una señal

En el ala derecha.

Sopla hacia el cielo

Tu pensamiento

Y lo verás...


-8-


Con la frente teñida de negro

Fui la Diosa de las Tormentas.

Con las mejillas coloreadas de azul

Fui la Diosa de las Grandes Lluvias

Con el cuerpo de la poesía

Sostuve el cielo

Y cualquier descifrador

Podía conocer

Cuando caía mi palabra

En los días de los hombres.

Así pude permanecer

Miles de años

Viviendo en los altares.

Pero el tiempo

Quita el poder

Que da el color

Y toda divinidad se vuelve

Sólo un puñado de tierra

Que nos mira...



-23-


Al son de la música sideral

El mundo va danzando

Nadie sabe a dónde

Colgado en el espacio soberano

Donde todo explota

Y se crea otra vez.

Y nosotros aquí adentro, sin sentido

Con nuestras locas vidas

Buscando la seguridad

Mientras la tierra corre por el cosmos

En trece movimientos, salta adelante

Se inclina a un costado luego al otro

Gira en sí misma, retrocede un grado

Da vueltas como un trompo de luz.

Nosotros, inmóviles buscando

La eternidad

Somos llevados nadie sabe a dónde

Metidos bajo las sábanas del misterio total.


ENSENTIDOINVERSO

Es necesario que el día
Nos contemple los huesos
Elevemos el amor desnudo
Al sol que está naciendo
Yo no tengo miedo de mostrar
El cuerpo que nos habita
A los que pasan
Y adivinan
Nuestra miseria
Faz a rostro yo te digo
Que en mí ya no existe
Ningún maravilloso secreto
Porque el día
Descubre el fondo
De las palabras que mienten


¿QUIÉN ES RAQUEL JODOROSWKY?


Raquel Jodorowsky, nació en Iquique-Chile en 1927. Ha publicado, entre otros, los poemarios: Dimensión de los días (1950), Aposento y Época (1952), El sentido inverso (1962), Mi casa abrakadabra (1970), 3 millones de años luz o el diario de una costurera (1972), Revelaciones de Alcindor (1983), Chan-Chan, maga lunar & Nazca nacer (1992), y el libro de cuentos Cuentos para cerebros detenidos (1974). Ha vivido gran parte de su vida en el Perú y se quedó en Perú para asumirlo como suyo.


Una mujer venida del fondo de la tierra, nacida geminiana adentro de una mina de cobre en el norte de Chile, hija de colonos: de un apaleado en Rusia, minero en Chile, profeta en Israel y de una madre constructora de arados y sembradora de maíz en Argentina. Raquel Jodorowsky, de oficio poeta, pintora, conversadora con lagartos, arañas y perros bravos. Aprendió a escribir antes de saber escribir. Descubrió los árboles a los once años y al ver al primero lo saludó creyéndolo un señor. Tiene trece libros escritos, un hijo y un gato. Cree firmemente en el hombre y en el arte.


¡¡¡ MÁS LARGA VIDA A ESTA ARTISTA, A TODOS LOS ARTISTAS!!

¡¡¡VIDA DIGNA PARA ELLOS!!

¡¡CALIDAD DE ATENCIÓN EN LA VEJEZ COMO UN DERECHO!!

¡¡AFECTOS Y SOLIDARIDAD!!


Katia Lapoint M.


(Textos proporcionados por la Maga Rosina Valcárcel).


jueves, 5 de junio de 2008

LA CASADA INFIEL, Federico García Lorca

A Lydia Cabrera y a su negrita

Y que yo me la llevé al río
Creyendo que era mozuela,

Pero tenía marido.
Fue la noche de Santiago
Y casi por compromiso.
Se apagaron los faroles
Y se encendieron los grillos.
En las últimas esquinas
Toqué sus pechos dormidos,
Y se me abrieron de pronto
Como ramos de jacintos.
El almidón de su enagua
Me sonaba en el oído,
Como una pieza de seda
Rasgada por diez cuchillos.
Sin luz de plata en sus copas
Los árboles han crecido
Y un horizonte de perros
Ladra muy lejos del río.

Pasadas las zarzamoras,

Los juncos y los espinos,
Bajo su mata de pelo
Hice un hoyo sobre el limo.
Yo me quité la corbata.
Ella se quitó el vestido.
Yo el cinturón con revólver.
Ella sus cuatro corpiños.
Ni nardos ni caracolas
Tienen el cutis tan fino,
Ni los cristales con luna
Relumbran con ese brillo.
Sus muslos se me escapaban
Como peces sorprendidos,
La mitad llenos de lumbre,
La mitad llenos de frío.
Aquella noche corrí
El mejor de los caminos,
Montado en potra de nácar
Sin bridas y sin estribos.
No quiero decir, por hombre,
Las cosas que ella me dijo.
La luz del entendimiento
Me hace ser muy comedido.
Sucia de besos y arena
Yo me la llevé del río.
Con el aire se batían
Las espadas de los lirios.

Me porté como quién soy.

Como un gitano legítimo.
La regalé un costurero
Grande, de raso pajizo,
Y no quise enamorarme
Porque teniendo marido
Me dijo que era mozuela
Cuando la llevaba al río.

Federico García Lorca,
España


(Texto proporcionado por Luis Anamaría, quien nos recuerda que un día como hoy, 05-06-1898, nació el poeta de Romancero Gitano y de Poeta en Nueva York).



miércoles, 4 de junio de 2008

DIEZ DÉCIMAS DE SALUDO AL PUEBLO, Alfredo Zitarrosa


Milonga

Allá en mi pago hay un poema
Que se llama No-me-olvides;
Quien lo conozca que cuide
Su recuerdo como gema,
Porque hay olvidos que queman
Y hay memorias que engrandecen,
Cosas que no lo parecen,
Como el témpano flotante,
Por debajo son gigantes
Sumergidos, que estremecen.

Mi pueblo es un mar sereno
Bajo un cielo de tormenta:
Laten en su vida lenta
Los estrépitos del trueno.
Puede engendrar en su seno
Las montoneras de otrora
Y cuando llegue la hora,
Mañana, también podrá
Sembrar a su voluntad
Mil estrellas en la aurora.

No hay cosa más sin apuro
Que un pueblo haciendo la historia.
No lo seduce la gloria
Ni se imagina el futuro.
Marcha con paso seguro,
Calculando cada paso
Y lo que parece atraso
Suele transformarse pronto
En cosas que para el tonto
Son causa de su fracaso.

Mi pueblo no es argentino,
Ni paraguayo, ni austral;
Se llama "Pueblo Oriental"
Por razón de su destino.
Pero recorre el camino
De sus hermanos amados,
El de tantos humillados,
El de América morena,
La sangre de cuyas venas
También late en su costado.

Mi pueblo no estuvo ausente
Ni mucho menos de espaldas
A la trágica y amarga
Historia del continente.
Fuimos un balcón al frente
De un inquilinato en ruinas
-El de América Latina
Frustrada en malos amores-,
Cultivando algunas flores
Entre Brasil y Argentina.

Pero mucho no duraron
Las flores en el balcón,
El rosquero y su ambición,
Imprudentes, las cortaron.
Y fueron las mismas manos
Que arruinaron el vergel,
Las que acabaron con él,
Las que hoy muestran, codiciosas,
En vez de ramos de rosas
Unas flores de papel.

No falta el bobalicón
Nostálgico del jardín,
Pero, entre todos, el ruin
Es el que trajo al ladrón;
Ese no tiene perdón:
Si protegen sus ganancias,
La decencia y la ignorancia
Del pueblo, son sus amores;
No encuentra causas mejores
Para comprarse otra estancia.

Ese sí, no es oriental,
Ni gringo, ni brasilero;
Su pasión es el dinero
Porque es multinacional.
Mentiroso universal
Desde que vino Hernandarias,
Piensa en sus cuentas bancarias
Ponderando a los poetas
Que hacen con torpes recetas
Canciones estrafalarias.

Así pues, no habrá camino
Que no recorramos juntos.
Tratamos el mismo asunto
Orientales y argentinos,
Ecuatorianos, fueguinos,
Venezolanos, cusqueños;
Blancos, negros y trigueños
Forjados en el trabajo,
Nacimos de un mismo gajo
Del árbol de nuestros sueños.

Y ahora reciban, señores,
Un saludo fraternal
Desde mi Pueblo Oriental:
Ya vendrán tiempos mejores.
Cifra de nuestros amores
Poncho patria es el encanto;
De mi pueblo y sus quebrantos
No les puedo conversar,
Solo les quise entregar
Su corazón con mi canto.

Alfredo Zitarrosa,
Uruguay